¿Por qué Marcos Llorente estaba en el ostracismo? Se ha ganado seguir
Después de ver el partido de anoche en Roma, la principal duda que uno tiene hoy miércoles es por qué Marcos Llorente estaba en el ostracismo en el Real Madrid, el único recambio de Casemiro y un futbolista que trabaja a tope cada día para ganarse un puesto en el equipo. Me alegra mucho su actuación en el Olímpico porque ha demostrado lo que ya hizo en el Alavés: hay futbolista, tan sólo hay que confiar en él.
Llorente es un mediocampista que te aporta orden en el centro del campo y cierto criterio con el balón, te ayuda a una salida limpia con el balón, un mediocentro posicional tan importante en el fútbol actual, una labor que ya dijo Kroos que no iba a hacer, me ahorraré dar mi opinión sobre el último año natural que lleva el alemán. Tampoco Ceballos va a servir habitualmente para esa labor defensiva, un futbolista de corte mucho más ofensivo.
El orden en el terreno de juego que vimos en Roma fue algo que apenas ha tenido el Real Madrid esta temporada, un equipo que se rompe en el mediocampo necesita futbolistas como Marcos Llorente y Lucas Vázquez para que hagan coberturas entre líneas.
Llorente se ha ganado seguir jugando la próxima jornada de Liga y empezar a tener ritmo de competición, tal vez la debacle de Ipurúa ha cambiado algo en la mentalidad de Solari pero sería una gran noticia si se confirma que Llorente va a empezar a contar con las oportunidades que un futbolista de su calidad merece. De momento, Llorente podría empezar a coger ritmo jugando frente al Valencia el próximo sábado y frente a la UD Melilla el jueves. Vamos a ver si Solari por fin decide hacer las convocatorias y las alineaciones por los momentos de forma y no por el nombre del futbolista…