ANÁLISIS BD | Basket Zaragoza: una reforma muy profunda
Después de la jornada de Euroliga ante el Maccabi de Tel Aviv, con remontada y victoria en la última posesión, el Real Madrid de baloncesto vuelve a la Liga Endesa, tras el parón de la semana pasada por las ventanas FIBA. Y lo hace en Zaragoza, donde se enfrentarán a un conjunto maño que no atraviesa su mejor momento, con 1 victoria en los últimos 4 partidos ligueros. Además, ese triunfo fue ante un Real Betis inoperante que lleva semanas a la deriva. Para los de Aragón, el total de esta temporada son 4 victorias y 7 derrotas, situándose a 2 tanto de los playoffs como del descenso.
El Basket Zaragoza afronta esta nueva campaña con un cambio radical en comparación con la plantilla del año pasado, con el objetivo de evitar el sufrimiento que padecieron gran parte de la temporada anterior. Aunque, por el momento, esto no se está cumpliendo. La transformación del equipo ha sido muy profunda, ya que del equipo de la anterior campaña solo sobreviven Rodrigo San Miguel, Javi García, Tryggvi Hlinason, Aleix Font y el cubano Javier Justiz.
A pesar de las grandes individualidades con las que contaban el año pasado y gracias a las cuales algunos jugadores han puesto rumbo a equipos de más nivel, como equipo no cumplieron los objetivos establecidos y por ello vemos esta reestructuración.
También hay cambios en el cuerpo técnico, tras el abandono del puesto por motivos personales del ‘oveja’ Sergio Hernández, al que le ha reemplazado Jaume Ponsarnau, que coincide en la llegada con el jugador nigeriano Stan Okoye, del que se espera su mejor versión como ya ocurrió cuando militó en el conjunto maño en la temporada 2018-19.
La apuesta por Santi Yusta se ha visto frustrada por el momento después de una lesión de menisco en la pretemporada que le iba a tener apartado de las pistas, al menos, un par de meses, pero que se le ha alargado y aún no ha debutado. Para suplir esa baja, en Zaragoza estuvieron rápidos y ficharon al polaco Adam Waczynski, un gran tirador, que llegó para mejorar una de las necesidades del equipo y lo está haciendo, con un 47% en triples.
Y como las desgracias, dicen, no vienen solas, en el último partido de la pretemporada también se lesionó Omar Cook, otro de los fichajes destinado a ser titular y que aún no ha entrado en la dinámica del equipo.
Otros de los fichajes que apuntalan un equipo que quiere ser divertido en ataque a pesar de sus bajas, con un juego rápido y buscando las esquinas, han sido el estadounidense Matt Mobley, que llega para el perímetro con el aval de ser el segundo mejor anotador de la liga alemana, mientras que el joven ala-pívot Dino Radoncic lo hace tras su cesión la pasada temporada al Acunsa GBC donde fue uno de los jugadores más destacados.
La plantilla la cierran en la pintura el belga Hans Vanwijn, el estadounidense Jamel McLean y Ramón Vilà, que quieren hacer de la defensa aragonesa un muro que aún está en construcción, ya que promedian 80 puntos en contra por partido. Eso sí, con el partido de los de Laso ante el Maccabi tan reciente, probablemente el cansancio blanco iguales las fuerzas en Zaragoza.