Ciao Champions, ciao Carletto, ciao Casillas...

14.05.2015 00:07 de  Jorge Calabrés  Twitter:    ver lecturas
Ciao Champions, ciao Carletto, ciao Casillas...
© foto de Jorge Calabrés

Fracaso del Real Madrid. El conjunto blanco pone fin a la temporada sin ningún título, una vez que el Barcelona tiene en su mano la Liga tras el pinchazo ante el Valencia. Los de Ancelotti no fueron capaces de ganar a la Juve en el Bernabéu e hincaron la rodilla, cediendo así el trono logrado la pasada campaña en Lisboa. Una noche dura para un madridismo que debe ser autocrítico y exigente con una plantilla que estaba diseñada para grandes metas. 

Y Ancelotti se marcó un Queiroz. Tras un comienzo de curso antológico, con Supercopa de Europa, Mundial de Clubes y récord de victorias consecutivas, el Madrid cayó en una depresión de la que solo se levantó a base de épica y orgullo. El equipo blanco no volvió en todo 2015 a mostrar la continuidad en el buen juego. El fútbol se fue con las campanadas de la Puerta del Sol, como si de una canción de Mecano se tratase. La mano blanda de Carletto, esa que también bien funcionó en su primer año, ha terminado un ciclo. El italiano dejó hacer a los jugadores, no mostró autoridad en momentos claves de la temporada y sacó a pasear su gran currículum cuando se le cuestionó por ello. La Juventus debe marcar el fin de Ancelotti en el Real Madrid. Tras un fracaso tan rotundo habrá que tomar decisiones dolorosas. El adiós del de Reggiolo será una de ellas. Ciao, Carlo. Muchas gracias y buena suerte.

El segundo que debe salir el próximo mes de junio es Iker Casillas. Contra la Juve, a pesar de que el gol de Morata es parable, realizó su mejor actuación en los últimos años. Sin duda, tras una campaña a un nivel pésimo, debe dar por finalizada su etapa en el Real Madrid. Mejor salir así que con una pitada monumental como en el encuentro ante el Valencia. El mejor Casillas es historia. Será una leyenda, pero el fútbol es presente y ya debería haberse marchado tras la consecución de la Décima. Es hora de dejar paso en la portería. Tan enorme guardameta como nefasto capitán. Solo el paso de los años dirá qué lugar ocupa en la memoria de los madridistas. Más luces que sombras, pero con una etapa final convulsa y llena de errores, no solo futbolísticos. Hasta siempre, Iker. Gracias por todo y cierra la puerta al salir. 

En caliente la lista de damnificados sería más amplia que la de Falciani, aunque habrá que dejar pasar unos días para analizar fríamente, ya sin el dolor de la derrota en Champions, la temporada. Los casos de Ancelotti y Casillas son tan flagrantes que no precisan de debate alguno. Ya está todo dicho. Es hora de comenzar una nueva etapa con una renovación profunda en el banquillo, en la capitanía y en la portería. Por ahí deben ponerse los pilares del nuevo proyecto deportivo. Si por el contrario solo se ponen algunos parches buenos, bonitos y caros; el traje no lucirá en las grandes noches, convirtiéndose así en un harapo de mercadillo. Renovarse o morir.