Vinicius, el Real Madrid y una triste situación

Vinicius Júnior fue pitado, silbado y abucheado en el último encuentro del Real Madrid frente al Sevilla, Una situación que hacía muchísimos años que no ocurría. Siempre recordaré aquella vez en la que fue pitado en un partido frente a Osasuna y, cuando marcó gol, se echó a llorar de rodillas en pleno Santiago Bernabéu. Años después, y con una trayectoria mucho más holgada sobre sus espaldas, siendo un jugador más importante y un futbolista mucho mejor, el brasileño volvió a vivir una situación similar, aunque en un contexto completamente distinto.

NECESARIO PERO EXTRAÑO

Vinicius ha dejado de ser la promesa que era en 2019 para convertirse, en pleno 2025, en un jugador más que contrastado. Eso ha provocado que la exigencia del Santiago Bernabéu hacia su figura haya aumentado. Sin embargo, no deja de entristecerme que un estadio que siempre fue el gran apoyo de un futbolista menospreciado y maltratado mediáticamente en España, ahora también se vuelva en su contra porque, futbolísticamente, está muy lejos de su nivel habitual. La Casa Blanca es soberana y no se calla con nadie, pero aun así no deja de producirme una sensación extraña. Algo que también me pasaba cuando pitaban a Cristiano, Benzema o Casillas.

Soy el primero que pedía a los madridistas, que acuden semana tras semana al Santiago Bernabéu, que dieran un paso adelante y enviaran un mensaje claro a los futbolistas. Creo que lo ocurrido con Vinicius, es parte de lo que se reclamaba. Pero, poniendo todo en contexto y analizando cómo se está desarrollando la situación entre Vinicius y el Real Madrid después de años tan bonitos, intensos y compartidos, resulta triste para quienes siempre hemos apoyado su continuidad en Chamartín.