El Madrid no es capaz de reconocer el principal problema que padece

Cierto es que en cada comparecencia pública realizada por el entrenador o los jugadores, se puede echar en falta un grado de autocrítica. Aseguran que no saben lo que les pasa, que el balón no entra... En definitiva, o sin incapaces de diagnosticar lo que está ocurriendo, o bien no quieren reconocer el motivo de su debilidad.

En diferentes acciones a lo largo de los últimos encuentros, hemos podido observar a varios jugadores desmotivados. El lenguaje corporal de algunos no es el ideal en determinados momentos. La baja moral del equipo es algo que se puede entender por el contexto actual, aunque no deberían dejar que les afectase. Esto es el Real Madrid y la entrega total es algo innegociable. Da igual las circunstancias que te rodean.

La dificultad de encontrar una respuesta al bajón de un equipo que en el pasado mes de agosto parecía imbatible es un auténtico rompecabezas. Ahora bien, existe un dato que podría confirmar el principal problema que sufre el equipo de Zidane. En las segundas partes los blancos se vienen abajo. Nueve goles a favor por once tantos en contra.

Esta teoría coge peso ya que titulares y suplentes padecen el mismo síntoma. El nivel físico de toda la plantilla, a excepción de Lucas Vázquez, es bastante malo. El equipo no carbura y su juego resulta más previsible para los rivales.