¿Qué ocurre con las rotaciones de Zidane en el Real Madrid?
Las alineaciones de Zinedine Zidane son todo una incógnita. En los partidos clave se puede uno imaginar quién juega. En cambio, en los encuentros de menor calado todo es diferente. Algunos piensan que Isco y Marcelo toman las riendas, y así ha sido hasta las derrotas de Cádiz, Alavés y Shakhtar. Ahí se produjo el punto de inflexión para Zidane. El francés se dio cuenta que algunos jugadores le han fallado o por lo menos no le rinden como a él le gustaría.
Por todo ello ha decidido optar por los que sí les saca partido. En los partidos de Sevilla, Gladbach y Atlético de Madrid salió prácticamente con el mismo once. No es raro que Kroos, Mendy y Modric lo hayan jugado todo. En la práctica han estado en forma, han sostenido al equipo y lo que más importante: el Madrid ha ganado y ha salvado la situación, hasta con buen fútbol se podría decir.
Los perjudicados, los del banquillo
Todo ello ha perjudicado al banquillo. Marcelo, Isco, Jovic o Militao se han quedado sin sitio. Cuando han jugado han perdido sus oportunidades de estar como titulares, porque no han dado la talla. Es cierto que las lesiones no les han dejado tener continuidad, pero los titulares han pasado por encima de estos jugadores y no les han dejado brillar.
Rotar en el Madrid ya no es una opción. De hecho, los propios jugadores pidieron a Zidane que no hiciera tantas rotaciones, que tocara al equipo lo menos posible. Esta circunstancia hizo que en partidos contra el Granada o el Eibar el once fuera muy parecido al de, por ejemplo, el día del Atlético de Madrid. Ahora, la solución la tienen los jugadores del banco del equipo. Deben demostrarle a Zidane por qué tienen que seguir en el Real Madrid.