CRÓNICA: Maracannschaft

14.07.2014 00:09 de  Jorge Calabrés  Twitter:    ver lecturas
CRÓNICA: Maracannschaft
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Alemania logró su cuarta estrella gracias a un gol en la prórroga de Götze (1-0). Los de Löw, superiores a Argentina, no realizaron su mejor partido y sufrieron para doblegar a una Albiceleste que tuvo el Mundial en las botas de Higuaín. La baja a última hora de Khedira dio vida a los de Sabella ante el desconcierto germano. La Mannschaft reina en Brasil y logra el primer título de un país europeo en América. 

 

La final comenzó con la triste noticia de la lesión de Khedira en el calentamiento por problemas musculares en los gemelos. Su ausencia dejaba al gran partido del Mundial sin representación madridista, ya que, tal y como se suponía, Di María no llegó a tiempo. Ni el tratamiento con células madre fue capaz de sanar a 'El Fideo'. La ausencia de los dos centrocampistas planteaba un nuevo encuentro, aunque con desventaja para Löw, al que pilló por sorpresa la baja de Khedira. 

En los primeros minutos Alemania dominaba la posesión pero de forma cansina e inútil, sin sacarle el más mínimo beneficio ofensivo. Los germanos echaban de menos a un Khedira al que sustituyó Kramer sin éxito. Para colmo de Löw, el jugador del Borussia Mönchengladbach se tuvo que retirar del terreno de juego antes de cumplirse la media hora tras un encontronazo con Garay. Schürrle ocuparía su lugar y daría otra cara a la Mannschaft, sobre todo en ataque. 

Higuaín hace de Higuaín

Ante la inoperancia alemana en los primeros compases, Argentina avisaba a la contra con Messi e Higuaín. El delantero del Barcelona iba a volver locos a Hummels y Boateng, aunque se fue disolviendo como un azucarillo. La velocidad de 'La Pulga' podía una y otra vez con los rudos zagueros germanos en los mejores momentos de los de Sabella. En el minuto 21 iba a llegar una ocasión que pudo cambiar completamente el rumbo del partido. Mala cesión de Kroos con la cabeza que se come toda la defensa e Higuaín, solo ante Neuer, se precipita lanzando desde lejos y de forma desviada. Fallo clamoroso de 'El Pipita' que no es extraño para los madridistas. Lyon, Dortmund y Atlético vinieron de un plumazo a la cabeza de los aficionados... y de Higuaín. En el partido más grande, el delantero del Nápoles también falló. Tampoco tuvo la suerte de cara cuando marcó en fuera de juego en el 30'. Acción bien anulada y la gloria para el exmadridista que se esfumaba entre la noche de Río de Janeiro. 

El último cuarto de hora de la primera parte dejaría un buen sabor de boca para el bocadillo del descanso. Emoción, ocasiones y polémica, de todo menos goles. Rizzoli perdonó la expulsión en el 34' a Höwedes por una entrada sin sentido a Mascherano. El colegiado castigó la falta con amarilla, mientras Höwedes, Löw y hasta Ratzinger daban gracias a Dios. La patada a la altura de la rodilla era clara merecedora de tarteja roja. 

Los mejores minutos de Alemania iban a tener como claro protagonista a Kroos. El que será jugador del Real Madrid la próxima temporada tuvo dos claras ocasiones para adelantar a su selección, sin embargo en ambas se topó con Romero. En la primera, por mérito del guardameta tras un buen latigazo; en la segunda, por demérito del centrocampista que tiró manso a las manos del portero del Mónaco. Entre medias, Messi volvió a sobrepasar a Hummels por velocidad y se metió hasta la cocina, aunque Neuer, bien colocado, desbarató la ocasión. 

Tócala otra vez, Toni

Y cuando ambos equipos ya pensaban en el paso por vestuarios, Alemania tuvo la oportunidad más clara. Córner botado por Kroos -tócala otra vez, Toni- que Höwedes mandó al palo tras entrar en el área argentina como un AVE en Atocha. La Albiceleste se salvó y Sabella respiraba hondo. 

La segunda parte comenzó con un movimiento táctico de Argentina. Agüero entraba por Lavezzi, cambiando Messi de posición y situándose por detrás de los delanteros. Como resultado de esta variante llegaría la ocasión del culé en el minuto 47. Messi volvió a internarse en el área y su disparo cruzado se marchó lamiendo el poste de la portería de Neuer. Tal y como ocurriera en la primera mitad, Alemania entraba fría y desubicada.  

Con el paso de los minutos, las fuerzas se fueron igualando y la polémica volvería a aparecer en el 57'. Galopada de Higuaín que solventa Neuer con una salida de puños, que sin embargo propina un buen rodillazo al ariete en la cabeza. Penalti o nada, pero nunca falta del argentino, que al final es lo que señaló Rizzoli. 

Mientras, la final iba entrando en la fase del miedo, esa en la que los equipos comienzan a pensar más en no perder que en ganar. La falta de ocasiones no deslucía un partido que ganaba en intensidad y emoción con el paso de los minutos. Alemania controlaba y Argentina esperaba para salir a la contra con Messi y Agüero. Ese sería el guión hasta el final del tiempo reglamentario. 

Una prórroga que pudo evitar Kroos en el 82' si su disparo colocado hubiera ido unos centímetros hacia la izquierda. Özil, con escasa influencia en el juego durante gran parte del choque, superaba a Rojo cada vez que tenía ocasión. En una de ellas, su pase atrás llegaba al todavía jugador del Bayern que golpeaba con intención pero sin éxito desde la frontal. 

El tiempo extra tuvo un claro color blanco. Alemania encerró a una Argentina en su área que solo se encomendaba a Messi y Agüero, aunque el jugador del Barcelona no daba señales de vida y encendió el modo paseo por Maracaná que tanto ha puesto de moda en 2014. Schürrle la tuvo en la primera acción, aunque el balón se lo encontró un Romero que se lo quitó de encima como pudo.

La gran ocasión de Argentina tendría como actores principales a Palacios y Hummels. El central, más tieso que la mojama, es superado por el jugador del Inter, que solo ante Neuer intenta una vaselina más típica de un patio de colegio que de toda una final de un Mundial. El intento, indigno de un escenario de tal magnitud, terminó fuera para tranquilidad de Merkel y de la colonia germana en Baleares. 

Mascherano se volvería a marchar de rositas tras una dura entrada a Schweinsteiger. Falta de tarjeta clara que Rizzoli no sanciona al más puro estilo Howard Webb en Sudáfrica 2010. 'El Jefecito', con amarilla desde el 64', incomprensiblemente acabó el partido, uno más para su cuenta. 

Götze da la cuarta estrella a Alemania

Sin embargo, cuando todo parecía indicar que el campeón saldría desde el punto de penalti, el fútbol iba a hacer justicia en el minuto 112. Alemania, finalista en 2002 y semifinalista en 2006 y 2010, se hacía con su cuarta estrella gracias a un gol de Götze. Un centro de Schürrle desde la izquierda es controlado con el pecho por el jugador del Bayern, que desde dentro del área bate con un tiro cruzado a Romero. 

Estalló Maracaná, Berlín y Magaluf. Argentina ni pudo ni supo contestar al tanto germano. Mientras, Mascherano seguía a lo suyo y volvió a esquivar la expulsión con otra entrada terrorífica sobre Schweinsteiger. El de 2014 no será el Mundial de Messi ni el de Argentina, será el de la Alemania de Kroos, Khedira y el gol de Götze. Por primera vez en la historia, una selección europea levanta la Copa del Mundo en el continente americano. Khedira, décimo jugador en conseguir la Champions y el Mundial en el mismo año. De Lisboa a Maracaná, fin a la temporada 2013/2014. 

 

ALEMANIA 1-0 ARGENTINA

Alemania: Neuer; Lahm, Hummels, Boateng, Höwedes; Schweinsteiger, Kramer (31', Schürrle), Kroos; Müller, Klose (88', Götze) y Özil (120', Mertesacker).

Argentina: Romero; Zabaleta, Demichelis, Garay, Rojo; Mascherano, Biglia, Enzo Pérez (86', Gago); Higuaín (78', Palacio) , Lavezzi (45', Agüero) y Messi.

Goles: 1-0, 112': Götze.

Árbitro: Nicola Rizzoli (Italia). Amonestó a Schweinsteiger (28'), Höwedes (34'), Mascherano (64') y Agüero (65').

Incidencias: Final del Mundial 2014 disputada en el Estadio de Maracaná (Rio de Janeiro, Brasil) ante 74.738 espectadores. 

© foto de Daniele Buffa/Image Sport