El dato que deja en evidencia a los árbitros: el Real Madrid no da crédito

El dato que deja en evidencia a los árbitros: el Real Madrid no da créditoBernabeudigital.com
Jesús Gil Manzano
© foto de Daniele Buffa/Image Sport
Oggi alle 17:28Noticias
de Javier Rubiano
El hartazgo con el colectivo arbitral en el conjunto blanco y sus aficionados no deja de crecer en este inicio de temporada

Que los árbitros parecen tener algo en contra del Real Madrid no es un rumor: lo dicen los números. Tal y como recoge diario AS, los rivales del club blanco reciben una amarilla por cada 16 faltas, mientras que los blancos son sancionados cada 5,75 faltas. Esta temporada en Liga, el conjunto madridista ha sufrido 64 faltas y apenas ha forzado cuatro amarillas y una roja. Por el contrario, los de Xabi Alonso han cometido 46 faltas y han recibido siete amarillas y una roja.

Más sangrante aún es el siguiente dato: en los tres partidos en el Santiago Bernabéu, los rivales no vieron ni una sola amarilla, salvo la roja a Bretones (Osasuna) en la primera jornada ya en el tiempo de descuento. En el Barcelona, sin embargo, los números son otros: sus rivales reciben una tarjeta cada 3,5 faltas. En 42 faltas cometidas por los contrarios, los culés sufrieron 10 amarillas y 2 rojas, 12,5 más que el Real Madrid.

HARTAZGO TOTAL EN EL REAL MADRID

El ejemplo más reciente del agravio se vivió en Anoeta, donde Jesús Gil Manzano expulsó a Dean Huijsen. A pesar de que el CTA reconoció el error, la roja se mantuvo y el central tuvo que cumplir sanción ante el Espanyol. El jugador del Real Madrid no se calló y publicó en redes sociales un desglose de cinco puntos denunciando la cadena de fallos: “Se admite el error, pero sigo sancionado. Buena imagen para el fútbol español”, acompañado de un emoticono irónico.

En el vestuario y en los despachos del Real Madrid, el hartazgo es total. Xabi Alonso se lo dejó claro a Gil Manzano en el Reale Arena: “Me hacéis pensar mal”. Los jugadores lo sienten, el entrenador lo verbaliza y la directiva ya ha elevado la queja hasta la FIFA.