De 'herniao' a fichaje del año
"Y que no me digan en la prensa, 'el herniao, el herniao', aunque a mí eso me la (palabra malsonante que encaja con letra y melodía), 'el herniao, el herniao'…" Así me imagino a Gareth en una tarde cualquiera de verano madrileño, versionando 'El Venao' a la galesa mientras limpia la piscina o hace abdominales, por ejemplo. Me encantaría meterme en la cabeza del 'herniao¡ por un momento para cotillear qué se siente habiendo estado un año entero aguantando las faltas de respeto de tanto plumilla, plumón y también de tanto aficionado indignado, para después tener que leer titulares que te califican como "el fichaje del año", tal y como aparecía titulado este sábado un artículo de MARCA.
En serio, si en este país cobrásemos por cada subida y bajada del carro del Madrid, sólo con el quehacer diario de la prensa deportiva saldríamos de la crisis y nos sobraría para sacar a Grecia y para comprarnos un Garesito por cabeza, así como capricho. Durante esta temporada hemos asistido a toda clase de críticas, ataques y descalificaciones a un jugador estratosférico cuyo único delito ha sido haber tardado un poquito más de lo normal en adaptarse a las exigencias de un club como el Real Madrid y a una liga como la española; "poquito" que se explica con dos hechos concretos que mis colegas periodistas han tendido generalmente a obviar: ausencia de pretemporada y lesiones inoportunas.
Ahora, con unos números más que notables (22 goles y 16 asistencias en su primer año de blanco) y con un papel protagonista en los dos títulos logrados por el equipo, son muchos los aficionados y 'profesionales' de la información deportiva que saltan con el "qué gran fichaje el de Bale, qué bien ha salido". Que no os engañen, esos son los que hace unos meses venían con la cantinela de la hernia fantasma y hacían bromitas con el ocurrentísimo "No 'bale' 100 millones" o "crack-catacrack" al más puro estilo diario Sport; son los mismos que decían que Gareth es un "chupón y un egoísta" (¿Eh, Caridad?) y que le viene grande el Real Madrid; son los mismos, probablemente, que hace un año andaban diciendo lo mismo sobre otro jugador que ahora veneran, un tal Luka Modric ¿Eh, Roncero?; son los mismos que decían que el galés no había sido "un fichaje deportivo" ¿Eh, Valdano?
Y así una ristra de puyitas bañadas en bilis que no han tenido más que remedio que comerse. El primer plato se lo zamparon de un plumazo en Mestalla, y todavía andaban convalecientes del estómago cuando llegó el gol de Da Luz para terminar de empachar a más de uno que ya se relamía señalando a Gareth como uno de los culpables de una derrota que nunca se produjo. A pastar, haters.