Paciencia, el mejor aliado del éxito
Esta columna quiere alejarse del recurrido llanto o lamento por alguna situación anómala o agravio. Se acerca el final de año y es buen momento para realizar balance y extraer unas pocas conclusiones. Desde la óptica del Real Madrid, hay una palabra que es clave para entender todo lo que ocurre: paciencia.
En la sección de fútbol ha sido, sin duda, un año delicado. Cambio de proyecto, nuevos fichajes. El inicio de temporada ha sido dubitativo, haciendo frente a obstáculos innumerables. A saber: Desconfianza de los más nostálgicos del anterior proyecto, sed de venganza de los torpedeadores del mismo, adaptación del técnico y de las nuevas adquisiciones etc. Frente a todo este entorno el cuerpo técnico y Club han sabido mantenerse firmes, la paciencia empieza a dar sus frutos.
Está también en el aire el proyecto de reforma del Estadio, que sin duda despierta ilusión en gran parte del madridismo. La ansiedad ante la falta de noticias es evidente, pero es claro que hasta que no se dé con una fórmula de financiación la opción sensata es no presentar el proyecto ganador. Evitaremos ridículos de presentaciones virtuales rimbombantes que luego no se materializan.
Y el baloncesto; días de vino y rosas. Un técnico cuestionadísimo, por muchos de nosotros (tú, que lees ahora, también dudaste, reconócelo) pero que a través de continuidad, buen hacer y acertadas contrataciones está dando espectáculo partido tras partido. No hay duda de que la paciencia ha ayudado.
Y recientemente tenemos el delicado asunto de la animación en el estadio, que ha saltado a la palestra con el conflicto existente en el principal grupo de apoyo activo al equipo. Se habla de oportunidades, grandes soluciones, etc. Lo único que podemos aportar nosotros es pedir paciencia, al igual que el resto de temas hay una luz al final del túnel, una luz blanca. Con paciencia se encenderá y llenara el estadio de color y de calor.
Paciencia, todo llega, todo llegará.