CRÓNICA: El retorno del Rey

Tricampeón de Copa. El Real Madrid se hizo con su tercer título consecutivo tras ganar en una bonita final a un meritorio Herbalife Gran Canaria (81-85). En un partido en el que el juego colectivo estuvo por encima de las individualidades, Gustavo Ayón se proclamó MVP con otra excelsa actuación y refrendando su papel de hombre clave. Los de Laso alargan su hegemonía con el sexto título de los últimos siete que han disputado. [Así vivimos el partido en directo]

 

El Real Madrid comenzó mandando en ritmo e intensidad. Los de Laso no tardaron en coger sus primeras ventajas con un sobresaliente, otra vez, Gustavo Ayón. El mexicano dominaba en las dos zonas y Maciulis se convertía en un todoterreno para lanzar a los blancos. Las dos faltas cometidas por Carroll mandaron al escolta norteamericano al banquillo cuando estaba en racha. Rabaseda, por su parte, mantenía al Herbalife Gran Canaria haciendo la goma en el marcador con dos triples (18-24).

La goma de Herbalife Gran Canaria

El segundo periodo comenzó con el típico arreón del Real Madrid en busca de una escapada defintiiva en el marcador, pero el equipo de Laso no lo logró en ningún momento a pesar de estar rondando durante varios minutos los 10 puntos de renta. Sergio Rodríguez ponía la magia y los blancos corrían con transiciones rápidas tras cerrar especialmente bien el rebote defensivo. Lima tomó el relevó de Ayón bajo los tableros pero en los últimos instantes de la primera mitad Herbalife Gran Canaria logró acercarse al Madrid hasta el punto de marcharse a los vestuarios solo dos puntos abajo (38-40). Aito García Reneses hacía de la rotación una virtud y con continuos cambios en el quinteto lograba mantener el pulso al actual campeón de Europa. Taylor, importantísimo en cuartos, y Hernangómez, clave para secar a Bourousis ante Laboral Kutxa, no fueron utilizados por Laso en la gran final. Muestra del increíble fondo de armario que tiene un equipo plagado de estrellas y que en La Coruña recuperó las sensaciones de la pasada campaña.

Tras el descanso el guión continuó repitiéndose. El Madrid cogiendo ventajas y Herbalife Gran Canaria sobreviviendo a base de casta y de triples imposibles como uno de Oliver desde más de siete metros. A pesar de la superioridad blanca, el conjunto canario se mantenía en la pelea con minutos de brillantez y gracias a la aportación interior de Báez y exterior de Oliver y Rabaseda, los dos máximos anotadores de los amarillos en la gran final. El toma y daca constante servía para que se llegara a los últimos diez minutos con todo por decidir y con los dos equipos soñando con hacer historia (59-62). Herbalife Gran Canaria por su ganar su primera Copa y el Madrid de Laso por ser el primero en lograr el título en tres ediciones consecutivas. 

Un Madrid fiable y experto en los momentos claves

Fue entonces cuando apareció la mejor versión de un Real Madrid coral en el que brillaron Ayón, Carroll, Reyes, Sergio Rodríguez, Maciulis y Rivers, todos ellos por encima de los 10 puntos. El rebote, con el a la postre MVP Gustavo Ayón y el capitán Felipe Reyes, y las jugadas rápidas bajo la batuta de Sergio Rodríguez sirvieron para que los blancos volvieran a tener la máxima ventaja del partido (70-82). Ni la cuarta falta de un desacertado Llull parecía poner en peligro la Copa, pero los nervios y las malas elecciones de los de Laso hizo que Herbalife Gran Canaria llegara con vida al último minuto gracias a dos triples de Rabaseda (81-83). Pero 'El Chacho' no perdonó desde la línea de tiros libres y el Real Madrid acabó con el sueño canario. 

La triple corona era ya una realidad. El equipo campeón de todo volvía a reinar en La Coruña tras el paréntesis de la Supercopa. El Real Madrid ha ganado seis de los últimos siete títulos en juego. El conjunto de Pablo Laso sigue haciendo historia a la vez que ya se ha convertido en leyenda. Otra final más, otro título más para un Real Madrid que aparecerá con letras de oro en los libros de baloncesto. Un equipo en el que el interés colectivo está por encima de todo. A pesar de que ningún entrenador de la ACB daba al conjunto madrileño como campeón, el Real Madrid demostró  que la Era Laso sigue vigente.