Media plantilla no merece vestir más la camiseta del Real Madrid
El Real Madrid es el mejor equipo de la historia. Y como tal, la presión y la exigencia son máximas en el conjunto blanco. Por ello, una temporada como la que está a punto de terminar (gracias a Dios) tiene consecuencias. El panorama es desolador: un grupo que pasará a la posteridad tras lograr cuatro Champions en cinco años y por formar parte de una de las mejores épocas del club, pero que ha firmado una de las peores temporadas de la historia del Real Madrid.
Los ciclos se acaban, y es evidente que el de esta plantilla ha llegado a su fin. Es duro, pero es así. La mitad de la plantilla se ha arrastrado por los estadios de España y de Europa en la presente campaña. Marcelo es uno de los casos más evidentes. Sin ir más lejos, ayer en Anoeta el brasileño no mostró ningún atisbo de ritmo competitivo (para muestra, el 2-1 en el que el brasileño se queda parado y Zaldúa le gana la tostada). Kroos es otro de los más señalados tras su errático año, mientras que jugadores como Varane, Bale, Casemiro, Isco y Asensio tampoco escapan de las críticas.
Duele especialmente el caso de los dos últimos, Asensio e Isco, idolatrados por la afición hasta no hace mucho. Sin embargo, balear y malagueño han mostrado una imagen deplorable a lo largo de la temporada, con números muy pobres y sensaciones aún peores: sin correr, sin luchar, sin presionar, sin rebelarse. Brahim, Vinicius, Fede Valverde y compañía les han ganado la tostada con todo merecimiento.
En definitiva, media plantilla no merece vestir más la camiseta del Real Madrid. Eso sí, claramente no todos se irán en verano, y algunos de los más señalados tendrán una oportunidad de revancha la próxima temporada. ¿La aprovecharán?