Nuestra última bala en el momento ideal

El Real Madrid ha hecho una temporada muy mala. Seguramente la peor de los últimos años. Sobre todo a nivel de sensaciones desde el mes de agosto, porque en pleno mayo prácticamente no se ha visto una evolución futbolística. Pero la realidad es que a pesar de todo, se llegó a una final de Copa del Rey que a punto estuvimos de ganarla, y en Liga se está a 4 puntos de un Barcelona que se ha mostrado arrollador en esta temporada. Sin embargo, la eliminación del conjunto blaugrana en Champions League, juega en favor de los de Ancelotti. 

Con la salida del entrenador italiano prácticamente sellada, y con un Clásico que enfrenta a un Real Madrid repleto de bajas y a un Barcelona algo alicaído, parece el momento perfecto para dar un golpe en la mesa. Por fútbol y sensaciones, soy negativo. Pero como digo, creo que el momento de confianza y ánimos en el que llegan ambos, puede ser algo beneficioso para el equipo blanco. Ganar sería un golpe durísimo para el Barcelona con tres jornadas por delante. Pero eso sí, perder sería el adiós definitivo. 

ÚLTIMA OPORTUNIDAD PARA MUCHAS PARTES

El Real Madrid está en el alambre. O acercarse y meter mucha presión, o despedirse radicalmente del único trofeo que queda sin contar el Mundial de Clubes. Quizás sea el Clásico al que peor llegue el Barcelona. Del equipo blanco no se puede decir que llegue en su mejor forma. Pero se agarra a un Arda Güler espectacular, y al plan de partido de la segunda mitad de la final copera, para vencer al elenco azulgrana.

Es la última oportunidad de Ancelotti de irse con otro título entre sus brazos. La de unos jugadores que en general debían haber dado bastante más, tanto por el club como por el propio entrenador. Y por supuesto, también la nuestra: la de un madridismo que no ha visto a un Real Madrid decente en toda la campaña. Eso sí, es una última bala en el mejor contexto posible para el Real Madrid, observando el transcurrir de toda la campaña.