Raza blanca tirador, y ahora también defensor
"Jaycee, Jaycee Carroll, Jaycee, Jaycee Carroll". De esta forma es ovacionado el madridista constantemente por el público del Palacio de los Deportes. El escolta norteamericano ha empezado la campaña con un tino y un protagonismo tremendos. En ataque ha estado extremadamente certero en todos los partidos, y en defensa se ha mostrado más intenso que nunca.
Con más de 10 puntos de media en menos de 20 minutos, tanto en Liga como en Euroliga, Jaycee es la cuarta potencia anotadora del Real Madrid más acertado y ofensivo casi de su historia. El chico de la pilla sonrisa y de la mano de killer supera el 40% de media en sus lanzamientos en la competición europea, llegando en ACB hasta el 63% de tino en tiros de tres puntos.
Aporta tanto en ataque como en defensa
Pero esta temporada Carroll no se está dedicando únicamente a anotar. Jaycee sabe que el Real Madrid ha dado un salto de calidad en la pintura, y como él mismo declaró en zona mixta, está "buscando mucho los postes, pasando mucho para no centrar la atención sobre mí". Esa movilidad que el ex del Gran Canaria está utilizando en su juego no hace otra cosa que beneficiarle más aún en el aspecto anotador. Sus porcentajes han mejorado respecto a la temporada pasada, así como su repercusión en el juego.
Además de este buen hacer ofensivo, el mayor cambio que Carroll ha incluido en su juego es la intensidad en defensa. Destacado por Laso en rueda de prensa, el americano ha dado un paso de gigante en su importancia y eficacia defensiva, lo que le ha hecho incrementar su número de minutos en cancha. El equipo ya no baja el listón atrás como sucedía en ocasiones la pasada temporada, y mantiene el nivel de manera constante para pesadilla del rival.
Desde la segunda línea, junto a Sergio Rodríguez, Slaughter y Reyes, siempre está para poner la puntilla al partido y al rival. Esa es la función de un Carroll sobresaliente que no hace otra cosa que demostrar su tremenda calidad baloncestística. Sonrisa de niño y manos de asesino. A esa mezcla se une la inteligencia defensiva con la que también está destacando esta temporada.