El culpable de la caducidad de Zidane tiene nombre y apellidos
El Real Madrid atraviesa por el segundo momento más duro de la 'era Zidane'. Injustificadamente esta plantilla sigue teniendo la tripa llena de títulos. En noviembre ya se olía a kilómetros que el entrenador francés no eran tan seguro como lo fue en su día. Al menos, así era como pensaba este servidor al que le dieron alguna de más sin argumento alguno.
En el tintero me guardo mi opinión como aficionado porque es innegable que el galo contaba con el aval de ganar lo que parecía imposible con Benítez. Ni flor, ni parche, ni si quiera el dinero fue el ingrediente secreto de esta mágica poción cocinada a base de trabajo. Sigo manteniendo que Zidane es el mejor entrenador del mundo, sin embargo, en el Madrid ya no funciona. Es un técnico para corto plazo, capaz de sacar el máximo rédito a toda su plantilla así como de quitárselo en menos de dos meses.
Los señalados son muchos. Desde la cúpula, por los incoherentes movimientos en el mercado estival, hasta los lesionados como Benzema. Aquí no se salva nadie, ni Cristiano. Pero realmente el verdadero culpable de la caducidad de Zidane es el propio Zidane. Apostó por futbolistas que no estaban bien. Vendió a James. No pidió los refuerzos suficientes. Se cargó a la segunda unidad. No dio continuidad a Asensio, quien la estaba rompiendo. Al igual que en las otras temporadas acertó de pleno, en esta la pifia ha sido mayúscula.
El vigente campeón deberá pelear por clasificarse para la Champions. Hace varios meses este hecho era una auténtica utopía, pero ahora es la mísera realidad. El código de barras es incorrecto. No hay ningún síntoma de mejoría y solamente queda reflexionar para remontar el vuelo. ¿Cómo que no hacen falta fichajes Zizou? Los resultados que llegan son alarmantes y para colmo el PSG golea. Colorín colorado esta temporada, si sigue así, en febrero ya habrá acabado.