Toca confiar en los jugadores 'señalados'
Hay cosas en el fútbol, y en la vida, que ni siquiera el mejor adivino puede descifrar. En un momento, cuando dabas la partida por perdida, cambia el juego y te coloca en una situación radicalmente distinta. Algo así les ha pasado a varios jugadores del Real Madrid con la llegada de Carlo Ancelotti. Isco Alarcón, Gareth Bale y Marcelo no contaban para Zinedine Zidane en sus últimas temporadas como técnico del conjunto merengue, algo que obligó al galés a marcharse al Tottenham para sumar minutos y goles, en concreto 16 tantos que casi igualan a los sumados entre Rodrygo, Vinicius, Hazard y Asensio (19).
Los casos de Isco y Marcelo son un tanto extraños. En su primera etapa como técnico en el Real Madrid, Zidane hizo de ellos dos de los pilares más importantes en la conquista de las tres Champions consecutivas. Puso al malagueño en el eje central del juego ofensivo de los blancos quitando a un Bale que, por culpa de las lesiones, no estaba en su mejor momento. La confianza del francés en el '22' era enorme, de hecho muchos medios de comunicación decían que era la prolongación de Zizou en el césped. Para desgracia del andaluz, sus dos últimas temporadas las ha pasado entre el banquillo y la grada. Sus motivos tendría ZZ pero lo que está claro es que con Ancelotti, al menos, recuperará sensaciones como se espera que haga su compañero Marcelo a pesar de que ahora se encuentre lesionado.
Gareth Bale ahora parece más feliz que nunca. Se muestra suelto con sus compañeros, incluso bromista. Parece consciente de que a falta de fichajes será muy importante para Carlo Ancelotti.
Tanto a Isco como a Marcelo y a Bale les resta solo un año de contrato, por lo que tendrán su último baile de blanco en el Santiago Bernabéu.
Tócala otra vez, Carlo.